ENVENENAMIENTO

CORNEZUELO DE CENTENO

Síntomas.
Si la dosis fuese exagerada, se verán sobrevenir síntomas generales de ergotismo agudo: náuseas, vómitos, dolores abdominales, evacuaciones alvinas, sequedad de garganta, sed, aversión por la comida; sensaciones pruriginosas en los miembros, embotamiento, cansancio, peso en la cabeza, vértigos, dilatación de las pupilas, delirio, modorra, debilidad del pulso, palidez del semblante, síncopes, convulsiones.
Además del ergotismo agudo, existe el envenenamiento crónico producido por el uso del cornezuelo de centeno, que ha sido observado en los individuos que se nutrían largo tiempo con pan mezclado de esta sustancia. Distínguense dos especias de envenenamiento crónico:
1° Ergotismo convulsivo, caracterizado por desfallecimientos, vértigos, embotamiento, calambres en las extremidades, turbación de la vista, pérdida de la sensibilidad y convulsiones seguidas de muerte.
2° Ergotismo gangrenoso, en el cual también sobreviene embotamiento de los pies, seguido de la gangrena seca.

Tratamiento.
Adminístrense 5 centigramos de emético; dense después la poción calmante y antiespasmódica, y agua acidulada con vinagre u zumo de limón. En los intervalos dése a beber vino generoso, infusión de menta. Adminístrese el opio a la dosis de los 20 centigramos por día. Poción tónica. Infusión de serpentaria de Virginia. Pediluvios con infusión de plantas aromáticas, como el espliego, el romero, la salvia, mezclada con vinagre. Hacer fricciones en las piernas con aguardiente, y cubrirlas después con bayeta caliente. Aplicar botellas de agua caliente en los pies. Si el entorpecimiento y la frialdad continúan, aplicar vejigatorios en los lugares próximos del mal. Si sobreviene la gangrena, practicar el tratamiento correspondiente.