Inicio    |    Guia Medica    |    Envenenamiento

 

.

ENVENENAMIENTO

CUIDADOS EN LA DETECCIÓN DE ARSÉNICO


Cuando el ácido arsenioso existe en abundancia en las materias sometidas a la experiencia, la carbonización de las materias por el ácido sulfúrico puede efectuarse en cápsulas de porcelana, así como las evaporaciones sucesivas. Pero si la porción de veneno es pequeña, puede temerse que una gran parte de ácido arsenioso se volatilice en la temperatura elevada que se necesita emplear para la expulsión del ácido sulfúrico. Lo mejor será, pues, en todo caso, practicar la carbonización en retorta de vidrio guarnecida de un recipiente, cuyas paredes estén mojadas. Los líquidos destilados se condensan en el recipiente, y puédese después examinar si contienen arsénico.

Si el médico es llamado a descubrir el envenenamiento después de la muerte, debe, practicar sus investigaciones, como antes lo indicamos, en las materias sacadas del estómago, y en la orina contenida en la vejiga.

Por último, si tuviese que descubrir el envenenamiento mucho tiempo después de la defunción de la víctima en un cadáver llegado a una descomposición más o menos adelantada, en este caso deberá operar sobre lo que quede del estómago, hígado, pulmones, bazo y corazón, órganos en los cuales el veneno se fija principalmente. Deberá carbonizarlos del mismo modo por el ácido sulfúrico, en retorta de vidrio, después de reducir dichos órganos a pedacitos.

Inútil es decir que todos los reactivos químicos empleados en esas operaciones deben ser muy puros, previamente ensayados con suma atención, a fin de saber que en ellos no hay vestigio alguno de arsénico. El médico podrá entonces tener completa confianza en el resultado de sus investigaciones, siempre que sean llevadas a cabo de una manera conveniente.

2014 - Guia Médica Siglo XIX. Aviso Legal