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GEOGRAFIA ECONOMICA - Aprovechamientos forestales
OTROS PRODUCTOS FORESTALES
Las resinas, la pez y el aguarrás son también productos de extracción forestal. Unas dos terceras
partes de su producción proceden de los Estados Unidos y del sur de Francia, particularmente
de los bosques de pinos situados en las más bajas latitudes medias. La pez y las resinas tienen
amplia aplicación en las industrias marítimas y el aguarrás en la fabricación de pinturas y
barnices y en gran número de composiciones químicas; la resina se usa, además, en la
fabricación de jabones. Como ejemplo de lo que puede la industria humana es digno de citarse
el caso de Las Landas del sudeste de Francia que, siendo una región arenosa y estéril, fue
totalmente sembrada de pinos, que hoy producen una considerable cantidad de aguarrás, pez,
resina y madera, se reproducen espontáneamente y proporcionan medios de vida a millón y
medio de habitantes. Es el caso contrario de la desatentada destrucción forestal en otras zonas.
En las zonas templadas y frías los bosques de maderas duras cubren millones de hectáreas,
particularmente en el hemisferio norte. Su explotación, en especial en Europa, suele ser
metódica y cuidadosa cuando son montes de propiedad particular, algunos de los cuales están
urbanizados como parques, y en forma de empresas industriales de vastas proporciones
tratándose de montes públicos o muy extensos. El consumo de madera depende de las
facilidades que existan para obtenerla o para obtener materiales que puedan sustituirla. En el
continente europeo el consumo es de 8 metros cúbicos por habitante y por año, mientras que en
Gran Bretaña es de 5, y en Estados Unidos es de 60. En este último país las extensiones boscosas
permitieron las explotaciones en grande, lo mismo que en el Canadá y en la Unión de
Repúblicas Socialistas Soviéticas. Pero donde las explotaciones de tipo industrial han sido
posibles, llegando a ocupar grandes masas de gente y acumular toda clase de medíos mecánicos
para la tala, preparación y transporte, ha sido en las inmediaciones de la taiga y en la taiga
misma, donde la vastedad y lo denso de los bosques de coníferas permitían las explotaciones en
gran escala. Como vimos al principio, la casi totalidad de esos montes se encuentran en el
hemisferio norte y ha sido allí donde las industrias madereras y sus derivados han adquirido
tan altos vuelos en los tiempos modernos.