Textos    |    Libros Gratis    |    Recetas

 

.
BIOLOGÍA - La simbiosis
LOS LÍQUENES
Hasta mediados del siglo pasado nadie sospechaba que un liquen estuviese formado por dos
vegetales asociados. El estudio detallado de su estructura, apoyado después por el cultivo en
medios artificiales de cada uno de sus componentes, demostró, sin embargo, que está formado
por una maraña de filamentos de hongo entre los cuales se alojan algunas algas verdes. Las
algas hacen la síntesis de los glúcidos, que el hongo aprovecha, y a su vez se benefician con la
humedad que éste almacena.
Lo más notable es que los líquenes alcanzan un grado de eficiencia, en razón de ciertas
condiciones del medio, que ninguna alga u hongo posee aisladamente. Ellos son los únicos
vegetales capaces de vivir sobre una piedra desnuda. Desempeñan, gracias a su increíble
tolerancia de los factores adversos del medio, un papel preponderante en la colonización de
terrenos áridos. Viven sobre tejados, ventanales de iglesias y sobre el hielo de las más altas
montañas.
De la misma deficiencia que los hongos, que no pueden sintetizar los glúcidos, sufren los
animales, algunos de los cuales recurren también a la simbiosis con algas. Uno de esos
animales-líquenes es la hidra verde, celentéreo cuyo cuerpo contiene gran cantidad de algas
unicelulares.
Liquen visto al microscopio. Las bolillas oscuras son algas verdes, envueltas por los
filamentos del hongo en simbiosis con ellas.
La dependencia nutritiva entre los dos asociados es del mismo tipo de la que existe entre
todos los animales, por un lado, y las plantas verdes por otro, sólo que aquí los cuerpos de los
asociados hállanse íntimamente ligados. La hidra aprovecha los glúcidos sintetizados por el
alga, y ésta, en cambio, se beneficia can el anhídrido carbónico resultante de la respiración del
animal y quizás extraiga de él también ciertas sustancias nitrogenadas.