HISTORIA DE AMERICA - La Conquista
CORTES ENTRA EN MEXICO
En Cozumel rescató a Jerónimo de Aguilar, clérigo compañero de Nicuesa, que le fue muy útil
como lenguaraz. Luego dominó a los tabasqueños, recibiendo de ellos bastimentos, trajes de
algodón y veinte mujeres, entre ellas la célebre doña Marina, que tanto ayudó al conquistador
sirviéndole de intermediaria en su trato con los indios. En San Juan de Ulúa supo Cortés por
primera vez de la existencia de Moctezuma y de la confederación azteca, de la cual éste era la
cabeza visible. Allí, aunque los españoles recibieron grandes regalos, los indígenas
prohibieron el paso hacia adelante. Cortés avaluó en unos 20.000 ducados estos obsequios y su
apetencia de dominio se acrecentó al verlos. Introduciendo la discordia entre las parcialidades
indígenas, o al menos fomentándola, se hizo de numerosas fuerzas auxiliares.
No olvidó, tampoco, sus funciones civiles. Hizo evangelizar a sus aliados y fundó la ciudad de
Villarrica de la Vera Cruz. Se hizo nombrar general en jefe y justicia mayor por el cabildo de la
nueva población, para obtener así un título que le emancipara de Velázquez. Desbarató una
conjuración en su contra y mandó quemar las naves —menos una— para poner a todos los
que dudaban entre la espada y la pared. Luego, apelando al castellano sentimiento del honor,
la ofreció a la disposición de los que quisieran volver a Cuba. Este sagaz gesto le valió ser
nuevamente aclamado. Todos se quedaron. Tras de nuevos sangrientos combates y de enviar a
Tlascala con las manos cortadas a los falsos embajadores que los tlascaltecas le habían enviado,
éstos (convencidos del carácter divino de los españoles) los recibieron como aliados.
