GEOGRAFIA FISICA - La Tierra en el Sistema Solar
FORMA DE LA TIERRA
La observación y diversas experiencias demuestran que la Tierra tiene una forma
aproximadamente esférica. No podía ser de otro modo, ya que tanto el Sol como los demás
planetas se nos presentan como verdaderos globos, con escaso achatamiento polar. En cuanto a
las irregularidades de la superficie terrestre, a pesar de su gran magnitud, tienen poca
importancia si se comparan con el radio del planeta; en efecto, la montaña más alta del globo,
el Everest, de 8.882 m., sería una saliente de menos de un milímetro si la Tierra estuviera
figurada por una esfera de un metro de diámetro; también sería insignificante la entrante
correspondiente a la mayor profundidad de los océanos (10.000 m., en el Pacífico).
En forma indirecta, midiendo parte de la circunferencia que pasa por los polos y calculando el
resto, se han podido hallar los valores de los diversos radios terrestres, que difieren
sensiblemente entre sí. Los radios polares son más cortos que los ecuatoriales, midiendo 6.356
y 6.378 kms., respectivamente. La Tierra es, pues, un planeta abultado en el ecuador y achatado
en los polos, siendo la causa de estos hechos la fuerza centrífuga desarrollada por el
movimiento de rotación, cuyo valor es máximo en la región ecuatorial. Podría compararse a la
Tierra con un elipsoide, cuerpo engendrado por una elipse, que gira alrededor de uno de sus
ejes (en el presente caso se trataría del eje menor). La circunferencia que pasa por los polos
sería en realidad una elipse con un eje mayor (diámetro ecuatorial) de unos 44 kms. más largo
que el eje menor (diámetro polar, o eje de rotación terrestre). Mediciones de gran precisión han
demostrado, sin embargo, que la verdadera forma de la Tierra no se adapta perfectamente a
ninguna forma geométrica conocida; constituye un geoide, es decir, la forma propia de la
Tierra, y que resulta aproximadamente de prolongar la superficie de los mares por debajo de
los continentes, como si aquéllos cubrieran toda la faz del globo.
El radio medio terrestre se estima actualmente en cerca de 6.367 kms. Este valor permite
deducir que la superficie de la Tierra es de unos 510 millones de kms. cuadrados,
correspondiendo a los mares cerca de las tres cuartas partes del total. Su volumen, que es
1.300.000 menor que el del Sol, alcanza, sin embargo, a la fantástica cifra de más de un billón de
kms. cúbicos.
