FILOSOFIA - La filosofía patrística
LOS GNOSTICOS. CLEMENTE DE ALEJANDRIA Y ORIGENES
Los gnósticos constituyen una dirección filosófica que trata, de manera parecida como proceden
los padres de la Iglesia griegos, de comprender y elaborar, filosóficamente, la doctrina religiosa.
El término se deriva de gnosis (conocimiento), ello es, el propósito de elevarse desde la fe (pistis)
en la autoridad de Dios y de la Iglesia, hasta un saber racional de las cosas divinas.
La filosofía de la gnosis se vincula al neoplatonismo. Dios produce por emanación una serie de
seres intermedios llamados eones. Entre Dios y la materia sitúan los gnósticos el mundo. La
emanación de los eones en serie descendente se recorre nuevamente en línea ascendente hasta
llevar a la salvación. La creación del mundo y la redención del hombre son hechos naturales.
MARCION fue el primer gnóstico significado. Después vienen APELES y BASILIDES. También
fue gnóstico MANES, el fundador del maniqueísmo.
En parecida actitud, bien que dentro de una concepción ortodoxa, se halla
CLEMENTE DE
ALEJANDRIA (160- 215), maestro de la célebre escuela de Catequistas de la misma ciudad. En
su libro Strómata busca una explicación racional del dogma, pero afirma que esta gnosis no ha
de contradecir jamás el texto revelado. La filosofía es una reflexión sobre la verdad y el mundo;
explica las cosas por sus causas y conduce, por necesidad, a la causa primera, Dios. Este "no es
género, ni especie, ni número, ni accidente, ni sujeto de accidentes, ni concepto universal. En
Dios no hay composición ni multiplicidad". El hombre se compone de cuerpo y alma, pero
formando una sola substancia.
Se ha dicho que San Clemente ha concebido el primer sistema de una filosofía cristiana. En
efecto, sus escritos abordan con erudición, ya elogiada por San Jerónimo, ora cuestiones de
método, ora de moral y metafísica.
ORIGENES (185-254) es el más importante filósofo de la gnosis cristiana,
fue discípulo y
continuador de la doctrina de Clemente de Alejandría, aunque más tarde fue excluido del
sacerdocio por considerarse heréticas algunas de sus doctrinas.
Orígenes acepta la doctrina del logos, en quien personifica la sabiduría divina.
La recreación del universo es eterna. Dios lo ha creado, incluyendo dentro de él a los espíritus, a
quienes ha dotado de libertad para que por propia decisión puedan realizar el bien. "Los que se
mantuvieron fieles a Dios, los ángeles, conservaron esta perfección, al paso que los que fueron
demasiado débiles para mantenerse fieles con su libertad, se alejaron más o menos de él. En
castigo de esta caída culpable, Dios los expulsó del paraíso. Los peores de entre ellos se hicieron
demonios, y los menos malos, almas de hombres. El castigo de éstas fue verse encerradas en la
materia, la cual (que antes se hallaba también en un estado más alto y suprasensible) adquirió
desde el pecado un carácter grosero y sensible. Pero un plan divino preside a toda la creación, y,
respondiendo a él, habrá un momento en que, gracias a la acción del Logos, hecho carne en
Cristo, volverán a Dios (apoltatástasis) todos los espíritus, hombres y demonios, tras larga
purificación en esta vida y en la otra. Dios, entonces, será todo en todo."
Orígenes es el filósofo más grande de la época inicial de la patrística. Su obra De los Principios
constituye la primera suma teológica.
La doctrina de Orígenes tuvo ardientes defensores y resueltos enemigos. Se deja sentir en
Antioquía y Capadocia, los nuevos centros en los que florece la teología cristiana. En esta época,
asimismo, nacen las herejías de ARRIO, NESTOR y PELAGIO. El arrianismo fue combatido por
SAN ATANASIO, obispo de Alejandría (siglo n/), y por los tres padres capadocios, SAN
GREGORIO DE NISA, su hermano
SAN BASILIO EL GRANDE y SAN GREGORIO
NAZIANCENO, que tuvieron una importancia extraordinaria en la formación de la dogmática y
la moral cristianas. En Occidente, SAN AMBROSIO, el famoso obispo de Milán.
