Textos    |    Libros Gratis    |    Recetas

 

.
DIBUJO DE FIGURA - Estudio de una cabeza en yeso de formas simplificadas
TERCER PASO
A continuación tenemos el modelo en la tercera etapa de su evolución.
Su aspecto nos demuestra que está totalmente terminado. Se habrá observado que la luz que
lo envuelve está situada en el lado izquierdo del dibujante. Sobre este punto diremos que es
de suma utilidad variar el foco de la luz según el modelo, de suerte que unas veces resulte
iluminado de izquierda a derecha, otras en el sentido inverso. En algunos casos conviene
también que el foco de la luz vaya de abajo hacia arriba o viceversa, con el propósito de
ofrecer variedad en la presentación al propio tiempo que presentar al estudiante problemas
plásticos distintos. Así comprenderá por sí mismo la posición más conveniente de la luz para
destacar nítidamente los relieves del modelo y buscará los efectos más agradables a fin de
acentuar siempre el modelado en lugar de perjudicarlo con una mala luz. El problema
planteado acerca de la posición de la luz nos invita a indicar como conveniente el uso de un
foco de luz artificial, a fin de que el estudiante no tropiece con los inconvenientes de una luz
débil sobre el modelo. De esta manera, tampoco estará expuesto a modificar constantemente
los tonos del claroscuro, como podría ocurrir si el modelo estuviese iluminado por la luz
natural que penetra por una ventana, puerta, etc.; esta luz natural varía constantemente en
razón de su propia naturaleza: en ciertos días de sol la luz resulta brillante, pero no es lo
mismo durante los días nublados, lluviosos, ni tampoco es igual en las diversas horas del día.
Los motivos expuestos acerca de la iluminación correcta del modelo justifican el hecho de que
en la mayoría de las escuelas de Bellas Artes u otros establecimientos de enseñanza donde se
dispone de buenas comodidades para el estudio del dibujo, se ilumina siempre el modelo con
luz artificial, especialmente si dicho modelo es de yeso, pues con ello se evita la pérdida de
tiempo que ocasionan a los alumnos los numerosos días de mal tiempo durante el año
escolar.
La experiencia aconseja dibujar también modelos iluminados con luz natural, alternando con
otros iluminados con luz artificial, a fin de educar el ojo a percibir los tonos suaves del
claroscuro. La luz natural ofrece tonos más suaves y transparentes, y el hecho de no notarse
muy marcadamente el límite entre los tonos de luz y sombra ofrece mayores dificultades para
su realización.
Para iluminar el modelo con luz artificial conviene que el dibujante se provea de un foco de
luz movible. En caso de no disponer de un brazo articulado ni de una lámpara de pie, puede
improvisarse un foco de luz rodeando a una lamparita común con un cono que podría ser de
cartón, o mejor aun si se confecciona de un metal delgado. Este puede pintarse con blanco en
la parte interior del cono, con el objeto de aumentar la intensidad de la luz sobre el modelo.
Se evita al mismo tiempo que la luz moleste al observador.
Deseando siempre ofrecer al estudiante los conocimientos más completos a la vez que fáciles
de comprender, aconsejámosle alternar la técnica de los trabajos valiéndose para ello de los
distintos materiales para el dibujo, a fin de dominar poco a poco los distintos medios de
expresión plástica. Para lograr este propósito conviene realizar varios dibujos totalmente en
carbonilla, y al propio tiempo alternar dibujando otros modelos por completo en lápiz,
usando para ello un lápiz más bien blando a fin de que la línea sea sensible, que el claroscuro
esté realizado con cierta frescura en los tonos suaves como también en los fuertes,
procurando siempre no lastimar ni cansar el papel. Ello requiere de parte del ejecutante un
mayor cuidado en la observación. Desde el comienzo de un dibujo con lápiz su preocupación
será constantemente la misma, esto es: trazar líneas suaves en todo momento, ya que el tono
más oscuro se puede obtener luego cruzando las líneas; al final bastará reforzar algunos tonos
para indicar los acentos generales, y con ello tendremos un dibujo de aspecto espontáneo por
la frescura de su realización. Por eso conviene usar una goma blanda a fin de no empastar el
lápiz ni dañar la superficie del papel. Recordemos, por último, que los planos de luz deben
limitarse con líneas muy tenues al comenzar un dibujo a fin de no tener que borrar luego,
perjudicando el papel, máxime si el modelo es de yeso, puesto que los planos de luz están ya
de acuerdo con el blanco del papel. Como ya se dijo, se usará Ingres blanco cuando se dibuje
con carbonilla y Canson blanco, si se desea dibujar con lápiz.