Textos    |    Libros Gratis    |    Recetas

 

.
BANCO Y MONEDA - Los acuerdos monetarios y financieros de Bretton Woods
EL PROBLEMA DE LAS MONEDAS ESCASAS
Sin embargo, podría concebirse una situación de esta naturaleza, cuando exista una gran
demanda internacional por una moneda cuya oferta es escasa en el mercado, como aconteció
en los últimos años con el dólar norteamericano.
Los Estados Unidos, por su posición de país acreedor, deberán mantener en forma
permanente una corriente de importación de mercaderías y de exportación de capitales al
extranjero, a fin de permitir a los países deudores la obtención de los dólares suficientes para
cumplir sus compromisos en esa moneda.
Si cualquier nación sudamericana compra más mercaderías a Norteamérica de las que venda
a dicho país, resulta que la demanda de dólares es mayor que la oferta, pues sus
importaciones del país norteamericano son mayores que sus exportaciones. Si además debe
pagarle servicios financieros, es natural que la demanda de dólares se incremente, mientras
que para aumentar la oferta de dólares, deberá transformar sus otras divisas o el oro en
dólares. Pero este procedimiento no puede ser permanente y para cumplir sus compromisos
en dólares optará por solicitar al Fondo su entrega, en canje de su moneda local. Mas si esta
situación es general y son muchos los países que se encuentran en ese estado, habrá una
gran demanda de dólares al Fondo, quien por su parte no recibirá ofrecimientos de esta
moneda, dado el estado de desequilibrio de los balances de pagos internacionales respecto al
dólar.
EL RACIONAMIENTO DE LA MONEDA ESCASA
En estas circunstancias, el Fondo deberá indicar que el dólar es una moneda escasa en el
sentido de que su demanda internacional es mayor a su oferta. Como medida concreta
racionará su entrega y autorizará a los países afectados a que restrinjan los pagos en esa
moneda.
En buen romance, esto significa autorizar el establecimiento de un control de cambios para
el dólar. Es lógico que si no hay dólares suficientes para pagar todos los compromisos
externos, a los países afectados no les quedará otro recurso que controlar la demanda de esa
divisa, racionando su entrega.