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ASTRONOMIA - Las hipótesis cosmogónicas
HIPOTESIS DE JEANS
Posteriormente, a partir de 1917, han aparecido diversos trabajos de SIR JAMES JEANS, que
son considerados hoy día como la última palabra en materia de cosmogonía. Según este
autor, hace 560 millones de años la galaxia entera formaba una masa única de gases muy
tenues en rotación lenta, la cual, a causa de su radiación se contrajo, mientras la velocidad de
rotación fue en progresivo aumento; pronto la masa adquirió forma lenticular, y la materia
fue proyectada por el borde. La atracción gravitatoria de los sistemas más próximos localizó
esta proyección hacia dos puntos antipodales, y la materia proyectada formó las ramas de
una nebulosa espiral de tipo normal. En esas ramas y en torno de sus núcleos emergieron
cadenas de condensaciones. En este proceso de contracción la temperatura fue en aumento,
hasta hacer que los núcleos brillaran como estrellas luminosas; al paso que la creciente
velocidad de rotación determinó la fragmentación en sistemas dobles. Con todo, para las
masas de dimensiones estelares, encuentra JEANS que la rotación no perturbada es
insuficiente para producir organizaciones como la del sistema solar; por lo cual, en estos
rasos. reclama la existencia de alguna perturbación procedente del exterior.
Y al efecto, supone que hace 300 millones de años una estrella mucho mayor que el Sol pasó a
menos de un diámetro solar de su superficie, cuando el Sol era oscuro y frío, con una
densidad tan débil que su radio podía compararse al de la órbita de Neptuno. Un chorro de
gas fue proyectado a la estrella vecina, que se condensó luego en forma líquida y se separó
más tarde en núcleos independientes. Estos últimos no pudieron volver a caer en el Sol, a
consecuencia de la atracción de la estrella vecina, y como cada núcleo pasó, a su vez, muy
cerca de la superficie de dicha estrella, de aquí que, por un proceso análogo al descrito, diese
por resultado la formación de satélites.
Posteriormente, en 1925, JEANS, sin dar razón de ello, modifica radicalmente las escalas de
tiempo y de distancia, exigiendo 200 billones de años sólo para la vida de una estrella; y,
entrando en nuevos detalles, fija en 6,4 billones de años el plazo necesario para que una
estrella alcance el estado de Sirio; 1,2 billones para pasar de este estado al del Sol, y después
otros 192 billones de años para alcanzar el estado de la estrella Krüger 60. En 1928 el mismo
JEANS considera las nebulosas espirales como sistemas cósmicos exteriores a nuestra galaxia,
con masas que alcanzan, como término medio, la de unos mil millones de soles. Estima el
número de estrellas luminosas en unos dos cuatrillones y admite que la edad del Sol está
comprendida entre 5 y 8 billones de años; calcula, finalmente, que en la actualidad no debe
haber más de 10.000 sistemas planetarios en la galaxia, y que las estrellas se habrán disipado
por radiación, antes de que puedan producirse muchos más.