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ANATOMIA Y FISIOLOGIA - Sistema nervioso
LA NEURONA: 
LA CONDUCCION DEL ESTIMULO NERVIOSO. El estado de excitación de un músculo se
revela por su acortamiento o su tensión y el de una glándula por su secreción, pero en cambio
ningún signo visible nos revela el pasaje de un estímulo a través de un nervio.
La aplicación de un estímulo a un punto del nervio produce en éste ciertos cambios (excitación
local) que se propagan a lo largo de la fibra como la llama por un reguero de pólvora
(excitación propagada). La transmisión del impulso nervioso es un proceso que va
acompañado de fenómenos metabólicos (aumento del consumo de oxígeno, producción de
calor, acumulación de metabolitos) y eléctricos.
Al excitar un nervio con una corriente eléctrica u otro estímulo eficaz se produce en el sitio
excitado un potencial eléctrico. Si éste alcanza cierto nivel crítico (umbral) se produce un
aumento brusco de potencial, que se puede registrar con métodos que captan y amplifican las
variaciones eléctricas. En los trazados, este aumento de potencial se registra como un pico o
aguja que se propaga a lo largo del nervio. La amplitud del pico es máxima una vez que el
estímulo ha llegado al umbral. También el nervio sigue, pues, la ley del todo o nada. Se puede
medir la velocidad de conducción del impulso nervioso colocando en dos puntos alejados del
nervio electrodos que capten la variación eléctrica propagada, a su paso por cada uno de los
puntos, y conociendo la distancia que los separa. Erlanger y Gasser, cuyos estudios sobre la
fisiología nerviosa les valieron el Premio Nobel, clasificaron las fibras nerviosas según su
velocidad de conducción en fibras A, B y C, dividiéndose el grupo A en 5 subgrupos. Las
fibras de mayor velocidad de conducción son las del grupo A, que son fibras con mielina,
motrices y sensoriales. Su diámetro alcanza hasta 20 micrones, y su velocidad de conducción
hasta 120 m por segundo. El grupo B está constituido por fibras mielínicas de pequeño calibre
pertenecientes al sistema simpático, con velocidades de conducción de 3 a 14 m por segundo.
El grupo C está formado por fibras muy finas amielínicas, cuya velocidad de conducción no
pasa de 2 m por segundo.
Como se ve, existe una relación directa entre velocidad de conducción y diámetro de la fibra
nerviosa.
Los nervios periféricos se componen de fibras de distinto diámetro y por consiguiente de
distinta velocidad de conducción.