Textos    |    Libros Gratis    |    Recetas

 

.
AERONAUTICA - Vuelos de ruta: navegación
AUXILIARES DEL AERONAUTA EN VUELO
Los primitivos auxilios para la navegación aérea aparecieron, con los primeros vuelos de
correo efectuados durante la noche, en forma de grandes fuegos encendidos a lo largo de la
ruta para guiar al piloto en su rumbo. Posteriormente se suplantaron por faros eléctricos, los
cuales se instalan ahora cada 15 kilómetros aproximadamente, a lo largo de las rutas y se
numeran de acuerdo con la distancia desde la iniciación de la ruta. Estos números o códigos
son irradiados por los faros, siendo fácilmente visibles al volar "en curso" durante la noche.
Los haces radiales que marcan el centro de la ruta están formados por la intersección de dos
señales que dan un zumbido continuo, audible a través de los auriculares del piloto, y que
aumenta en intensidad cuanto más se acerca el avión a la estación que emite la serial.
La estación de radio emite dos señales diferentes A y N, correspondiendo estas letras a .— y.
del alfabeto Morse, respectivamente. La N es enviada al cuadrante (o aproximadamente un
cuarto del área que rodea la estación), el cual incluye el norte verdadero. La misma señal se
envía también al cuadrante opuesto en 180
9
al primero, y las señales A se dirigen a los otros
dos cuadrantes restantes. De esta manera, al acercarse a la estación, es posible orientarse
escuchando la señal. Aproximadamente cada 30 segundos hay una señal, en código, de
identificación de la estación para ayudar al piloto a orientarse y también para indicarle cuál es
la estación cuya señal recibe. Si la señal de cuadrante que el piloto recibe es una A, el piloto
puede colocarse en cualquiera de los dos cuadrantes. Por la intensidad de la señal puede
determinar si está volando hacia la estación o alejándose de ella. Consultando su brújula y
observando la dirección en que el avión está orientado, puede deducir en cuál de los dos
cuadrantes está volando, y, procediendo de acuerdo con lo establecido al respecto, puede
volar hacia el haz, para continuar desde allí a un aeropuerto o continuar por la ruta. Las
señales se envían de manera tal que se cruzan, formando con dichos cruces el haz o faro
correspondiente. Como se envían las dos señales A y N, la señal escuchada por el piloto se
convierte en un zumbido continuo (el .— y —. se combinan formando un solo tono).
También suele ocurrir que la atracción magnética local hará que estos haces o faros oscilen en
algunos lugares, lo cual complica los problemas de la navegación. Otras irregularidades de
estos haces consisten en su separación bajo ciertas circunstancias, y en este caso la señal se oye
sobre uno de los lados del mismo.