SÍFILIS
ÚLCERAS SIFILÍTICAS
Las úlceras sifilíticas pueden ser primitivas, esto es, manifestarse algunos días después del contacto impuro; o consecutivas, es decir, presentarse después de una afección antigua, cuyos primeros síntomas habían ya desaparecido.
Las úlceras primitivas se muestran comúnmente en los órganos genitales; las consecutivas aparecen en la garganta, dentro de las narices, en las piernas y brazos.
Por lo general, las úlceras sifilíticas son redondas, de bordes duros y cortados perpendicularmente. El tamaño es muy variable, las primitivas (chancros) tienen la dimensión de la cabeza de un alfiler o de una arveja; las consecutivas pueden adquirir grandes dimensiones.
Todas exigen el uso interno del mercurio y del ioduro de potasio, cuyas preparaciones van indicadas en el tratamiento de la Sífilis, lo mismo que las curaciones locales.