INFLAMACIONES
SÍNTOMAS DE LA PULMONÍA
Pulmonía aguda.
Fiebre, calofríos, ardor en el pecho. Dolor de pecho lancinante, profundo, más o menos, que aumenta durante la inspiración y la tos. Respiración acelerada, opresión del pecho. Tos frecuente, seguida de esputos viscosos, que varían de color según la época de la enfermedad; color de hollín, de azafrán, de naranja, de ladrillo, verdosos, color de zumo de regaliz o de cocimiento de ciruelas pasas.
La percusión da un sonido macizo en el lugar afectado: la auscultación hace oír el estertor crepitante al principio de la enfermedad, el cual cesa cuando la inflamación está más adelantada. El pulso es más o menos fuerte y frecuente; late 100 a 120 veces en el adulto; 120, 140 y hasta 180 en los niños; en las personas ancianas es muy irregular.
El termómetro centígrado, aplicado bajo el sobaco, señala el primer día 39° o algunos décimos más; el calor sigue en aumento los días siguientes y llega a 40,8° y 41,2°.
(En el estado de salud el termómetro marca, por termino medio, 37,7°)
Los otros síntomas son: cefalalgia, insomnio, agitación, disminución de las fuerzas, delirio. Si el enfermo ha de curarse: piel húmeda, los esputos dejan de ser sanguinolentos, son blanquecinos; disminución de la fiebre y del dolor de costado, reaparición del estertor crepitante. En el caso contrario, persistencia y agravación de los síntomas; respiración más constreñida, semblante lívido, sudor viscoso, esputos de color rojo oscuro, enfriamiento de las extremidades, pulso cada vez más débil, irregular; estertor traqueal.
En las personas ancianas la pulmonía se presenta a veces complicada con síntomas adinámicos. En algunos casos existe un estado latente, sin fiebre, sin tos, sin dolor de pecho, sin expectoración, y no se puede conocer sino por la percusión o auscultación. Percutiendo el pecho, se obtiene sonido macizo; aplicando el oído sobre el pecho rara vez se percibe la crepitación, pero sí un ruido de gargarismo.
En los recién nacidos y en los niños hasta un año de edad, la expectoración falta completamente. Los síntomas que anuncian la pulmonía en esta edad son; tos, aceleración de los movimientos respiratorios, disnea, expiración rápida, quejosa, con dilatación de las ventanas de la nariz, seguida de inspiración pasiva y de un tiempo de reposo, estertor crepitante en el pecho.
Pulmonía crónica:
Esputos blancos, poca o ninguna fiebre, dolor nulo, sonido macizo den el epcho, estertor mucoso, carencia total del murmullo respiratorio.
