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ÁCIDOS

ENVEVENAMIENTO POR ÁCIDO FÉNICO


El envenenamiento puede tener lugar, no solo por la ingestión del ácido fénico en el canal digestivo, sino también por la absorción cutánea.

Los síntomas tóxicos por la administración interna son: respiración estertorosa, pérdida de conocimiento, pupilas contraídas, pulso lento, náuseas, vómitos, sudores fríos. El mejor contraveneno es el agua de cal muy concentrada y dulcificada con azúcar.

El envenenamiento ha sido también observado por las fricciones, inyecciones o curas hechas con soluciones demasiado concentradas de ácido fénico en el alcohol, agua, aceite o glicerina. Los síntomas son: calofríos, vómitos, postración general, pulso débil, descenso de temperatura; las orinas exhalan olor de ácido fénico.

El tratamiento consiste en lociones con agua simple o mezclada con harina de mostaza, poción con éter, y uso de las bebidas estimulantes, tales como té con ron. Por lo común los enfermos sanan; sin embargo, ha habido casos de muerte.

Los envenenamientos por la aplicación externa de las preparaciones fénicas han sido sobre todo observados en Inglaterra, donde el ácido fénico es usado en dosis muy concentradas.

Para las curaciones de las heridas, o para fricciones, no deben empleara soluciones que contengan más de 1 por 100 de ácido.

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